Y se ha cumplido la profecía, los creyentes DeFi vieron materializado el primer paso de la regulación del Bitcoin como moneda de curso legal en América Latina. Ha sido el presidente Nayib Bukele quien ha impulsado el primer antecedente de Ley para el curso legal de una criptomoneda con la Ley Bitcoin en El Salvador.Si bien la noticia ha divido opiniones, es inevitable aceptar que la Ley Bitcoin podría iniciar un efecto dominó que motive al resto de países a acelerar el proceso de aceptación de las criptomonedas como monedas de circulación legal, dado que su uso se ha generalizado en casi todo el planeta.El primer paso está dado y en Brickken te traemos lo más relevante de las diez disposiciones generales y seis transitorias de la Ley Bitcoin.
Podemos deducir que se trata de una Ley sencilla y concisa que deja muchas incógnitas respecto a su implementación, sin embargo, se encuentra pendiente la elaboración, aprobación y publicación del Reglamento de la Ley Bitcoin así que suena conveniente mantener nuestras reservas de cómo se irán adaptando y modificando los artículos dispuestos en la Ley con base a la ejecución de esta.Por su parte, el presidente Bukele anunció que se espera la adquisición de US$150 millones en bitcoin con el fin de crear el fideicomiso estipulado en el punto 14 de las disposiciones transitorias, donde dicho importe representa no mas del 3% de lo que El Salvador recibe anualmente en remesas.
Ante la noticia de la aprobación de la Ley Bitcoin, la opinión pública se ha dividido entre quienes consideran que el proyecto de Ley fue una decisión precipitada que requería mayor discusión, pues la volatilidad de bitcoin representaría un fracaso para la economía del país, mientras que por el lado contrario hay quién califican al presidente Bukele de valiente líder visionario que ha puesto a El Salvador en la historia de la revolución Blockchain, transformando la dinámica económica de la sociedad que conocemos.
El Salvador es ahora el Sandbox del mundo en donde veremos si la decisión de aprobar dicha Ley resulta un acierto para la economía logrando la inclusión financiera del 70% de su población sin acceso a una cuenta bancaria o, por el contrario, resulta la crónica de una muerte anunciada al implementar una Ley en un país donde la población está estrechamente arraigada al uso de efectivo y las limitaciones transaccionales de bitcoin impiden obtener el objetivo deseado, ya que bitcoin no fue diseñada como moneda de curso legal.Cual sea el resultado, estaremos atentos y mirando de cerca el comportamiento de la regulación en El Salvador, que sin importar haya sido precipitada o acertada en tiempo y forma, ha quitado el freno de un tren que llevaba un curso lento, acelerando a un ritmo del que ya no hay marcha atrás.Desde Brickken, cogemos esta noticia con emoción, ya que es un salto cuantitativo y cualitativo para la adopción de tecnología blockchain, ya no solo por los individuos y las empresas, sino también por los Estados mismos. No tenemos ninguna duda que la aceptación como curso legal de las criptomonedas abrirá un sinfín de posibilidades a la tokenización de los activos.Si quieres saber más sobre la tokenización, te invitamos a que te descargues nuestro informe.